Recuerdo artístico / Lola Montes

La cantante madrileña Lola Montes se llamaba, en realidad, Mercedes Fernández. Triunfó profesionalmente tanto en nuestro país como en América interpretando con enorme elegancia los cuplés. Uno de los más conocidos, “El novio de la muerte”, composición de aire militar firmada por Fidel Prado, letra, y Juan Costa, música, que conquistaría de inmediato no sólo a los miembros de la Legión española –de hecho acabaría convirtiéndose, en línea musical de marcha, en su himno- sino a todo tipo de público. Curiosidad: lo estrenó saliendo a escena vestida de enfermera y causó tal impacto que, según ella misma recordara décadas más tarde, tuvo que repetirlo tres veces. “Juventud, belleza y arte” eran algunos de los factores que Lola Montes transmitía bajo la luz de los focos, por lo que las empresas más importantes del espectáculo solicitaban siempre su presentación. En Santander disfrutó de dos grandes éxitos: las dos veces que actuó en el Teatro Pereda. Es decir, en diciembre de 1921 y en diciembre de 1922. Qué mejor forma para despedir ambos años que contar con su presencia en el escenario de aquel inolvidable recinto.